Sierra brilla en Wimbledon
Solana Sierra sigue escribiendo páginas doradas para el tenis argentino en Wimbledon. La joven marplatense de 21 años ganó a la española Cristina Bucsa por 7-5, 1-6, 6-1 en la pista 12 del All England Club en una campaña que ya está siendo inolvidable.
Sierra, que actualmente entrena en la Rafa Nadal Academy, continúa batiendo récords. Se ha convertido en la primera lucky loser (perdedora afortunada) de la Era Abierta que alcanza octavos de final de Wimbledon en el cuadro femenino. Antes, se había convertido en la primera argentina en alcanzar la tercera ronda del cuadro principal de Wimbledon desde Gisela Dulko en 2009.
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Estos logros cobran aún más valor al considerar que su recorrido en este Grand Slam empezó con una derrota en la fase previa. Una lesión de la belga Greet Minnen le abrió las puertas del cuadro principal como lucky loser y Solana no dejó pasar la oportunidad. En primera ronda superó con autoridad a la australiana Olivia Gadecki, para luego derrotar en segunda ronda a la británica Katie Boulter, que jugaba ante su público, y en tercera a Bucsa.
Este avance representa más que un hito individual: es un símbolo del trabajo constante que la joven ha venido realizando en el circuito ITF, donde forjó su tenis con disciplina. En 2022 ya había mostrado señales de su proyección internacional al alcanzar las semifinales del US Open Junior Championships, además de ocupar el puesto número 12 en el Ranking Juvenil del ITF World Tennis Tour.
Parte de su crecimiento se debe al apoyo del Programa de Desarrollo de Jugadores de Grand Slam (GSPDP) de la ITF, que brinda oportunidades a tenistas de países con menos recursos. Solana ha sido beneficiaria de este programa en tres ocasiones, recibiendo un total de 75.000 dólares claves para sostener su carrera en la élite.
Sierra también representa regularmente a Argentina en la Billie Jean King Cup, y ha sido protagonista del ITF World Tennis Tour, donde en la última temporada conquistó seis títulos. En abril de este año dio un salto cualitativo al ganar el torneo WTA 125 de Antalya, su primer título en esa categoría. En mayo, sumó su trofeo más importante del ITF World Tennis Tour al coronarse en el W75 de Bellinzona, su título profesional número 15.
Pase lo que pase, la irrupción de Sierra ya ha marcado un antes y un después. Ha devuelto a Argentina al mapa de los Grand Slams femeninos, y encarna el ejemplo de cómo la perseverancia, el talento y el apoyo adecuados pueden ayudar a los tenistas a ser competitivos en los grandes escenarios del deporte mundial.